El asma se define como un trastorno inflamatorio crónico que se caracteriza por la obstrucción reversible de las vías respiratorias. Aproximadamente el 5% de los adultos y el 10% de los niños en los Estados Unidos padecen asma. El asma es la enfermedad infantil más crónica. La mitad de todos los casos se desarrollan antes de que los pacientes alcancen los 10 años de edad. Aparece con mayor frecuencia en las poblaciones afroamericanas e hispanas. Si bien los episodios asmáticos agudos suelen ser de resolución espontánea, pueden presentarse como una condición clínica denominada estado asmático que no responde a los broncodilatadores.
El asma se clasifica en 2 categorías: extrínseca (asma alérgica) e intrínseca (asma no alérgica).
El asma extrínseco ocurre con más frecuencia en los niños. Es desencadenado por alérgenos específicos como el polen, el polvo, los mohos y los alimentos altamente alergénicos como la leche, el huevo, el pescado, el chocolate, los mariscos y el tomate. Los medicamentos y los productos químicos como la penicilina, las vacunas, la aspirina y los sulfitos pueden desencadenar un ataque de asma alérgicoAproximadamente el 50% de los niños asmáticos superan el asma extrínseca a finales de la adolescencia o a principios de los veinte años.
El asma intrínseco generalmente se desarrolla en adultos mayores de 35 años. Los ataques son provocados por factores no alérgicos: infección respiratoria, esfuerzo físico, contaminación ambiental y aérea. El estrés psicológico y fisiológico puede inducir un ataque asmático. El estrés causado por el reto de un padre o por el ingreso al consultorio dental puede desencadenar un ataque de asma en niños y adultos.
En ambos tipos de asma, el mecanismo de inicio del ataque es el mismo. Los factores alérgenos o no alérgenos estimulan al nervio vago a liberar acetilcolina que produce la constricción de las vías respiratorias y el aumento de las secreciones glandulares que obstruyen las pequeñas vías respiratorias en los pulmones. Esto provoca el edema bronquial y la obstrucción de las vías respiratorias.
Los signos y síntomas de un ataque asmático agudo son:
El tratamiento de un paciente asmático comienza con la confección del historial de los tratamientos previos. Preguntar al paciente:
Si el paciente utiliza un inhalador broncodilatador durante los ataques asmáticos agudos, por ejemplo, albuterol (Proventil, Ventolin), isopoterenol (Isuprel) o metaproterenol (Metaprel, Alupent), debe llevarlo a su cita. Los broncodilatadores producen la relajación del músculo liso bronquial. El albuterol tiene la menor cantidad de efectos secundarios de todos los broncodilatadores y debe incluirse en el botiquín de medicamentos de emergencia.
Los pasos del tratamiento de emergencia de un episodio asmático agudo son: